Te invito a sumergirte conmigo en su origen, su significado, cómo utilizarlo, y a recibir un protocolo sencillo y poderoso para integrarlo en tu propio camino de evolución espiritual.
Este es un tiempo de integración, donde debemos activar, memorias encriptadas en nuestro ADN, para poder acceder a la información que necesita cada ser sintiente de acuerdo a los procesos que el alma ha avanzado en este plano de consciencia.
¿Qué es el Antakarana?
El Antakarana es un antiguo símbolo de sanación y expansión espiritual. Es considerado un puente de conexión entre la mente inferior (la personalidad) y la mente superior (el alma o Yo Superior). Su nombre proviene del sánscrito, donde "Antah" significa interno y "Karana" significa causa o instrumento. Literalmente, el Antakarana es el instrumento interno que conecta nuestra existencia terrenal con nuestro ser divino.
Este símbolo no pertenece a ninguna religión específica, aunque ha sido utilizado a lo largo de milenios en prácticas espirituales en Tibet, China, India y otras tradiciones esotéricas. Su forma, compuesta de líneas entrelazadas que crean una figura tridimensional, genera una poderosa vibración de energía que trasciende el tiempo y el espacio.
Origen y Energía del Antakarana
El Antakarana ha sido utilizado por sanadores, monjes y maestros espirituales durante milenios. Se cree que fue transmitido en tiempos antiguos por civilizaciones avanzadas que entendían la geometría sagrada como un lenguaje universal. Algunos sostienen que su origen se remonta a los templos lemurianos y más tarde fue preservado por los iniciados del Tíbet y la India.
Lo que distingue al Antakarana es que su vibración está codificada en su forma misma. No necesita ser activado ni "consagrado" para funcionar: simplemente estando en su presencia o enfocándote en él, su energía comienza a trabajar en tu campo áurico.
Beneficios de trabajar con este símbolo.
Trabajar con el antahkarana puede traer una serie de beneficios. Entre ellos se incluyen:
1. Mayor claridad mental: A medida que fortalecemos nuestra conexión con el antahkarana, podemos experimentar una mayor claridad mental y una capacidad mejorada para tomar decisiones sabias y conscientes.
2. Desarrollo de la intuición: El antahkarana nos conecta con nuestra intuición interior, lo que nos permite recibir información y guía más allá de la lógica y la razón.
3. Expansión de la conciencia: Al trabajar con el antahkarana, podemos elevar nuestra conciencia a niveles superiores, aumentando nuestra comprensión y percepción de la existencia y la realidad.
4. Conexión con lo divino: El antahkarana actúa como un puente hacia lo divino, permitiéndonos establecer una conexión más profunda y significativa con el aspecto espiritual de nuestro ser.
5. Evolución espiritual: A medida que desarrollamos y fortalecemos nuestro antahkarana, avanzamos en nuestro camino de evolución espiritual, experimentando un crecimiento y transformación personal.
El símbolo.
El Antahkarana es un símbolo multidimensional. Está constituido por tres números siete sobre una superficie plana, desde una perspectiva parece bidimensional. Los tres siete representan los siete chakras, los siete colores y los siete tonos de la escala musical. Desde otra perspectiva aparece como un cubo tridimensional.
Su energía se mueve desde dos a tres dimensiones visibles, continuando hacia arriba por vías energéticas imperceptibles para el ojo humano, continuando hacia arriba hacia la dimensión del Yo superior.
La meditación con este símbolo mirando constantemente al centro del mismo produce un cambio positivo energético.
Antiguamente los lamas del Tíbet, realizaban la meditación con este símbolo en una habitación iluminada con velas. En el medio había una vasija de barro en forma de óvalo simbolizando el huevo cósmico del universo, esta vasija se llenaba con agua, frente a la misma había un pequeño taburete, sobre el asiento de éste estaba el símbolo antahkarana realizado en plata, donde se sentaba la persona que iba a meditar.
Había también una pared cubierta con cobre, pulido como un espejo. En la pared opuesta a esta habían tapices que mostraban símbolos. El lama tibetano se sentaba en el banquito y miraba fijamente la imagen del símbolo que se reflejaba en el espejo de cobre.
Esta meditación es una meditación yantra y crea agudeza en la mente, haciendo un puente energético entre la conciencia y las energías trascendentales del símbolo; mientras que el otro símbolo antahkarana en el banquito enfoca las energías generadas haciendo fluir las energías equilibradas por todos los chakras hacia la tierra.
Este maravilloso símbolo es muy especial y tiene su propia conciencia. Trabaja directamente sobre el aura y los chakras y regulariza variando los efectos de sanación de acuerdo a las necesidades de la persona que lo usa, al estar dirigido por el Yo superior tiene un efecto benéfico. Jamás se lo deberá utilizar para el mal.
¿Cómo utilizar el Antakarana?
El Antakarana puede ser utilizado de varias maneras, siempre con el propósito de elevar la vibración personal, sanar bloqueos y fortalecer la conexión espiritual:
Meditación: Puedes colocar una imagen del Antakarana frente a ti mientras meditas. Permite que tu mirada repose suavemente sobre el símbolo y deja que su energía actúe, llevando tu conciencia a niveles más elevados.
Sanación: En terapias de Reiki o sanación energética, puedes colocar el símbolo debajo de la camilla o sobre el chakra que requiera equilibrio. Amplifica la energía sanadora y promueve la liberación de bloqueos.
Protección energética: Llevar el símbolo contigo (como un talismán o impreso en un objeto personal) ayuda a mantener tu campo energético alineado y protegido de influencias negativas.
Limpieza de espacios: Colocar el Antakarana en tu hogar, oficina o lugar de meditación ayuda a purificar y elevar la energía del entorno.
También se los puede colocar debajo del colchón de la cama en la que uno duerme, debajo de una mesa de masajes, colgado de una pared para armonizar el lugar, exponerlo sobre alguna dolencia, etc.
Existen diferentes formas del Antakarana (masculino, femenino, doble, triple) y cada una tiene matices específicos, pero todas comparten el mismo principio esencial: ser un catalizador de transformación espiritual.
Protocolo de Activación Personal con el Antakarana
Para aprovechar plenamente el poder del Antakarana en tu camino de crecimiento espiritual, te propongo el siguiente protocolo sencillo y amoroso:
Materiales:
- Una imagen del Antakarana impresa o dibujada.
- Una vela blanca.
- Incienso de sándalo o mirra (opcional).
- Un espacio tranquilo donde no seas interrumpido.
Pasos:
- Preparación del espacio:
- Limpia tu espacio físico.
- Enciende la vela y, si deseas, el incienso.
Conexión interna:
- Siéntate cómodamente con la espalda recta.
- Respira profundamente al menos tres veces, soltando tensiones con cada exhalación.
- Enfoque en el símbolo:
- Coloca el Antakarana frente a ti.
- Mira el símbolo suavemente, sin forzar la vista. Permite que su geometría "te absorba" de manera natural.
Oración de conexión (puedes adaptarla según tu sentir):
"Desde la luz que habita en mi corazón, invoco la energía sagrada del Antakarana.
Que su puente de amor y sabiduría se despliegue en mí,sanando mis memorias, elevando mi conciencia y alineándome con mi Yo Superior.
Que cada línea, cada forma, despierte en mí la verdad de quien soy.
Hoy me abro a recibir su guía amorosa en este proceso de evolución.
(Aquí puedes añadir tu intención personal específica).
Gracias, gracias, gracias. Así es."
Meditación breve:
Cierra los ojos y visualiza cómo el Antakarana se expande desde tu corazón, formando un pilar de luz que conecta la Tierra con el Cielo a través de ti.
Permanece en esta conexión entre 5 a 15 minutos.
Cierre:
- Agradece al símbolo y a tu propia alma por este momento.
- Apaga la vela y guarda tu Antakarana en un lugar especial.
Reflexión Final
El Antakarana no es solo un símbolo para observar; es una herramienta viva que puede convertirse en un aliado constante en tu camino de autodescubrimiento. Al integrar su vibración en tu vida diaria, recordarás que el puente hacia tu ser superior ya existe dentro de ti. Solo es cuestión de despertar y caminarlo, con amor, fe y compromiso.
Que el Antakarana ilumine tu sendero y te recuerde siempre que la verdadera sanación y expansión comienza desde tu corazón hacia el Infinito.
Te abrazo en amor,
Mónica.
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